domingo, agosto 02, 2009

No te conozco....(poema)

No te conozco
Y sin duda eres la temible bestia
Que con tu lengua amarilla-anaranjada
Arrasas, arrastras la desgracia de los montes.
Implacable y desnudo jugueteas con dolor de las gentes,
De los animales, de la flora en la senda del miedo y la muerte.
Tus bocanadas saben a quejumbre, a una mezcla de agonía y desesperanza
Que retuerce las vidas arrebatándoles su verticalidad
Con tu amante el viento, el viento.
No te conozco
Pero de ti hablan y hablan
Como el monstruo de la oscuridad
Cuando la mano humano tiene un desliz
¿Por qué?
¿Por qué?
El llanto de las ramas desemboca
En despertares desoladores donde las venas de la isla bonita
Son rajadas por ti fuego espíritu del mal.

2 comentarios:

tartucas dijo...

SÚPLICA A UN DIOS INEXISTENTE

II TIM. 2, 11-13 Verdadera es la palabra “que si padecemos con Él, también con Él viviremos. Si sufrimos con Él, con Él reinaremos. Si le negamos, también Él nos negará. Si le fuéremos infieles, Él permanecerá fiel, que no puede negarse a sí mismo.




No te conozco.
Te presumo, te siento, te defino.
No te conozco

¿Dónde estas?
¿Dónde estabas cuando me perdí,
cuando los cielos se abrieron en aguacero,
cuando mis labios palpaban encuentros,
cuando las piedras laceraban mis tobillos,
cuando la soledad, la triste soledad
empujaba más adentro?

¿Es eso negarte amor?
¿Es eso negarte, Amor?

Negaré, mil veces negaré.
Al calvario del destino,
a la fuerza de este viento,
a las ruedas de molino,
a todo lo que siento,
a lo vivido.

¿Es eso padecer amor?
¿Es eso padecer, Amor?

Si tu alma a mi alma impresa,
si tu sombra me redime,
si tus labios me hablan, dime:
¿Por qué tu ausencia?



No te conozco.
Te sueño, te lloro, te invento.
No te conozco.

Si mi huida es tu huida,
si mi cuerpo es tu cuerpo,
si cada frase que digo
me la dicta tu silencio
dime:

¿Es eso infiel amor?
¿Es eso infiel, Amor?

Mis labios están rotos
de sangre, de cieno, de rabia
por lo dejado,
Por haber sido,
Por coronar mi cetro de espino,
Por sentirme lleno de tu vacío.

¿Por qué me niegas,
si mi negación parte de Ti mismo?
¿Dónde está mi hambre de tu hambre?
¿Dónde está el rojo de tu vino?
¿Dónde esa paloma blanca?
¿Dónde ese niño?

No te conozco.
Te sufro, te llamo, te seco.
No te conozco.

Víctor Yanes dijo...

Muy bueno, me ha llegado al corazón, me ha gustado mucho. Soy Victor y mi blog es: http://vctoryanes.blogspot.com/